Beber café orgánico significa que estamos consumiendo un producto sin agroquímicos; el cual ha sido producido bajo estricto control internacional de calidad y sustentabilidad.
El consumo de café orgánico ha ido en aumento dados los beneficios que tiene en la salud, y la Hacienda de San Antonio, ubicada en el bello estado de Colima, es uno de los lugares que produce café de alta calidad.
Don Arnoldo Vogel y Doña Clotilde Quevedo fundaron la Hacienda de San Antonio en 1897, reconociendo que la ubicación de sus tierras era ideal para el cultivo de café, pues se encuentra a altura entre 1,200 y 1,600 m.s.n.m*, donde las tierras fértiles y el clima fresco proveen la combinación ideal para su producción.
La conservación de la humedad es elemento clave en la producción de un café de
calidad pues permite un desarrollo pausado del fruto y, por consiguiente,
el desarrollo de sus cualidades: acidez, aroma, sabor y cuerpo, los exalta a la perfección el café Hacienda de San Antonio.
La reputación del suave y aromático café se dio a conocer mundialmente con la exportación a diferentes países. Y desde finales del siglo XIX, el café producido en la hacienda utiliza las mismas técnicas tradicionales, sin químicos, pesticidas o fertilizantes creados por el hombre.
La cosecha del café de Hacienda de San Antonio es anual y se realiza entre los meses de Diciembre y Mayo de forma manual. Obtenidos los granos, se llevan al Beneficio en el rancho El Jabalí, donde se secan a la intemperie. En tanto, el tostado de café se lleva a cabo cuando existe demanda para así asegurar una excelente entrega de café fresco.
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